Educación en las Cooperativas

Licda. Xiomara Núñez de Céspedes

En los programas de educación las cooperativas tienen garantizado el desarrollo y la formación de sus miembros. La importancia que reviste la capacitación a lo interno de las cooperativas se puede medir en su actuar público,  miembros debidamente orientados serán personas ocupadas en el desarrollo de la empresa  más que en los beneficios personales. 
Existe en la actualidad la tendencia a mal dirigir la capacitación hacia otras áreas que desvían los objetivos y principios de la cooperativa, sin entrar en valoración de cual o no importantes sean los temas,  el eje central es y seguirá siendo los principios, valores y uso correcto de los servicios cooperativos, nunca es suficiente tratar estos temas ya que las empresas cooperativas están en permanente crecimiento dando lugar a que cada día sea necesario educar.
Con sobrada razón sabemos que en un mundo rápido y globalizado existen un sin número de temas y  realidades que requieren la atención de los comités de educación, sin embargo esta necesidad no debe detener ni aminorar los requerimientos que le dieron origen a la creación del quinto principio cooperativo.
La formación debe tener como base primordial la capacitación integral de los asociados  como forma de garantizar que los mismos sean capaces de asumir los retos y responsabilidades desde cualquier posición donde se encuentren y a la vez sean competentes de participar democráticamente en igualdad de oportunidades, en la utilización de los servicios y en la vida institucional.
Hay que cuidar que los  recursos no se inviertan en congresos y diplomados, que  no guardan relación con los objetivos planteados, recursos que utilizados correctamente traer cambios en la actitud y cultura de los miembros. 

Las comunidades demandan temas de para el desarrollo personal y laboral. Los  organismos de bienestar social deben centrarse en su objetivo a fin de permitir al comité de educación concentrar sus esfuerzos en el espíritu de su creación. 

No debemos olvidar  llevar a la práctica los principios y valores cooperativos contextualizados desde una perspectiva de género, destinemos recursos específicos a programas de promoción de la mujer en el cooperativismo y en la comunidad, abrir espacios de participación política, facilitando la postulación de mujeres en los órganos de dirección, somos conscientes que juntos lograremos que la humanidad viva tiempos mejores.

Mi pueblo perece  por falta de conocimiento Oseas 4:6

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