De
acuerdo a Wikipedia: en economía el coste o costo es
el valor monetario de los consumos de factores que supone el ejercicio de una
actividad económica destinada a la producción de un bien o servicio. Todo
proceso de producción de un bien supone el consumo o desgaste de una serie de
factores productivos, el concepto de coste está íntimamente ligado al
sacrificio incurrido para producir ese bien. Todo coste conlleva un componente
de subjetividad que toda valoración supone.
Si
aplicamos lo antes dicho al liderazgo como producto pudiéramos decir que el valor o costo de un líder
dependerá en la invención en tiempo, conocimientos y motivación hechos por el
grupo. El líder es el producto del esfuerzo personal y del grupo por
desarrollar sus competencias de liderazgo.
Las
cooperativas invierten tiempo y recursos en la formación de sus líderes, en la
actualidad el currículo de un líder cooperativo tiene un peso específico son innumerable los talleres, diplomados,
cursos, etc. A lo que debe asistir en aras de
mantenerse informado y actualizado a la altura de las exigencias de un
modelo cooperativo innovador y de característica de empresa de la economía
social en desarrollo.
Es
esta la principal razón por la que los grupos con conciencia plena de cómo se
debe dirigir una empresa cooperativa procuran con diligencia conservar lo mejor
de su liderazgo, sin que ello implique lesionar la democracia en su interior.
Para
un grupo con miras de progreso lo más importante es elegir lo mejor y más
capacitado dentro de su liderazgo, no se arriesga a cambiar la diatriba por la
eficiencia y capacidad.
Es
trabajo de los líderes dejarse guiar por la razón y el bienestar del grupo dejando de lado las aspiraciones y simpatías
personales para promover y valorar lo mejor del liderazgo, esto sin duda
redundará en el fortalecimiento de la empresa cooperativa y el desarrollo pleno
hacia una mejor calidad de vida de los grupos.
Mientras
más se invierte más se demanda, sería sumamente arriesgado no cuidar la
inversión, esta máxima es aplicable a todos lo que podamos medir en valores.
La
valía de un liderazgo es percibida por el grupo, sin embargo cualquier rumor
popular puede dar al traste con la inversión, de hechos algunos elementos que
no llegar al peso especifico en el liderazgo irrumpen en el mismo al crearse un
vacío de poder debido al desplazamiento incorrecto de un liderazgo sano.
La
clave está en mantenerse vigilante procurando en todo momento que nuestros
lideres no solamente tengan un peso especifico sino también que reciban la
justa valoración en todo su accionar.
" Pagad a todos lo que debéis: al que
tributo, tributo; al que impuesto, impuesto; al que respeto, respeto; al que
honra, honra. Romanos 13:7